YOGA: UN CAMINO HACIA TI MISMO
“El camino de miles de kilómetros comienza con un solo paso”
Proverbio chino
El yoga, un paso hacia ti mismo y por ti mismo. En la dirección que marca tu propia brújula. Sin que nadie piense por ti. Sin que nadie decida por ti. Sin que nadie viva por ti. Un solitario y pequeño paso que te conducirá por la más increíble de las sendas, hacia la aventura más sorprendente: el conocimiento de tu cuerpo, el control de tu mente, el reencuentro con tu alma.
Mucha gente duerme la vida, sin llegar siquiera a sentirla.
Sin embargo, existe otro tipo de persona: el ser humano consciente que camina, busca, se pregunta, indaga. Llega un momento en la vida en que esa persona se para y comienza a escuchar. Primero se asusta, porque oye mucho ruido. Pero después, poco a poco, aprende a diseccionar los sonidos como si estuviera realizando con ellos un laborioso análisis microscópico. Entonces, un día, sonríe. Y la sonrisa es profunda, porque proviene del centro de su alma. Y la sonrisa es eterna, porque comprende que ha empezado a escuchar los latidos de su propio corazón.
En ese día, esa persona concreta habrá dado un primer paso hacia sí misma, el único movimiento que tiene sentido. Se inicia aquí el camino. A partir de ahora, tendrá que elegir entre las múltiples sendas que conducen a la meta y se verá obligada a avanzar, paso a paso, a través de escarpados acantilados, hermosos jardines o tempestuosos mares.
Todo viaje es un viaje iniciático y eso implica superar pruebas.
Todos tenemos un camino por andar, unas lecciones que aprender y un alma que reencontrar.
El compromiso contigo mismo y con tu propia vida puede dar sentido a esa llamada que, desde el centro de tu pecho, tantas veces te ha angustiado sin que comprendieras por qué, de qué se trataba o qué te estaba pasando.
Una vez has decidido que deseas empezar a caminar tienes que elegir, cuidadosamente, el sendero. El yoga es una de las opciones posibles.
Al final, si buscas, encuentras. El mejor consejo es que no te detengas hasta dar con la práctica que se adapta a tu cuerpo, a tu mente, a tu alma. Porque esa será la que abrirá la puerta de tu camino. Porque esa te permitirá ser constante, condición fundamental si realmente se quiere avanzar por ese sendero.
Y, ¿cómo sabes qué la has encontrado? Sencillamente, lo sabes. Porque, de pronto, te encuentras experimentando un bienestar antes desconocido. Porque, sin venir a cuento, sonríes. Porque te levantas por la mañana dispuesto a tener un gran día. Porque sabes descubrir la fuerza para enfrentarte a los problemas. Porque tienes un centro. Porque aprendes que eres luz y que, como tal, puedes brillar.
Sin embargo, todas estas perspectivas pueden llevar a engaño. EL yoga no es una varita mágica que convierte las penas en alegrías, lo negro en blanco, las lágrimas en sonrisas. Es, más bien, un trabajo diario en el que el “sadhaka” (practicante) tendrá que comenzar a escuchar su alma. Empezará a ver cuales son las cadenas que le atan, cuáles los impedimentos con los que su propio cuerpo, su propio corazón o su propia mente obstaculizan la conquista de la felicidad.
El practicante de yoga comenzará a darse cuenta de que su ego lo esclaviza, que es prisionero de sus pasiones: “Dame a un hombre que no sea esclavo de sus pasiones y yo le colocaré en el centro de mi corazón”1. Este es el primer paso de un largo y duro camino. Porque, a partir de aquí, esa persona ya no puede hacer otra cosa que comprometerse.
Y es un compromiso importante, tal vez el más importante de su vida, puesto que implica ser fiel a sí misma, al más profundo anhelo de su alma. Y es un compromiso que no tiene vuelta atrás porque, si abandonas, si desfalleces y caes, tu vida nunca volverá a ser como antes. Es duro pero gratificante. Tu cuerpo se vuelve más flexible. Tu mente, se serena. Tu vida se pacifica. Tu corazón se calma. Es duro. Requiere sinceridad. Requiere autoanálisis. Requiere trabajo diario. Requiere paciencia y constancia. Sin embargo, has vislumbrado tu luz, te sabes hermano de las estrellas, ¿cómo podrías, pues, dejar de brillar?
Elena Almirall Arnal.
1 “Hamlet” Shakespeare
martes, 10 de noviembre de 2009
lunes, 12 de octubre de 2009
El corazón yermo
No podemos sino constatar que en la sociedad moderna no existe educación del corazón. Consideramos, con toda razón, que es normal la necesidad de educar el intelecto de una persona, enseñarle a pensar y someterla a diferentes ejercicios para ayudarle a asimilar reglas lógicas, elementales o complejas; también consideramos que es normal educarla para que aprenda cierto tipo de lenguaje, ya sea matemático, informático, jurídico....... Sin embargo, que haya que educar a un ser humano para vivir, para manejar sus emociones y sus sentimientos se nos antoja una idea totalmente descabellada. En el terreno de los afectos cada cual debe apañárselas por sí solo. A un niño se le puede reprochar tener un comportamiento colérico y dejarse llevar por sus emociones ante cualquier adulto o figura de autoridad, pero ni los padres ni los educadores escolares le transmiten jamás la menor pauta sobre su forma de vivir, de integrar y canalizar sus vaivenes emocionales. Sólo, ya adulto, podrá quizás recurrir a la ayuda de un psicoterapeuta para empezar a desenmarañar la confusión de un corazón yermo. ! Con la esperanza de que los daños causados por la ausencia de esa educación no sean irreversibles ¡
Sin embargo, las diferentes vías espirituales entre ellas el Yoga contienen enseñanzas que,
puestas en práctica, ayudan a manejar las emociones conflictivas, a sanar el corazón y a poner de manifiesto los tesoros que de él emergen cuando está de verdad abierto.
En un momento en que nuestra sociedad está inmersa en el odio y en los terribles conflitos y sufrimientos que de él nacen, la revolución del corazón es tan importante en el plano colectivo como en el plano individual.
( Sabiduría del corazón de Gérard Pilet )
Sin embargo, las diferentes vías espirituales entre ellas el Yoga contienen enseñanzas que,
puestas en práctica, ayudan a manejar las emociones conflictivas, a sanar el corazón y a poner de manifiesto los tesoros que de él emergen cuando está de verdad abierto.
En un momento en que nuestra sociedad está inmersa en el odio y en los terribles conflitos y sufrimientos que de él nacen, la revolución del corazón es tan importante en el plano colectivo como en el plano individual.
( Sabiduría del corazón de Gérard Pilet )
jueves, 20 de agosto de 2009
Viajar hacia ti
Ya esta pasando el verano, que nos conduce al otoño, que da paso al invierno y da lugar a la primavera. Así la vida sigue su camino sin descanso, sin pararse.
El verano, tiempo de extroversión, de salir, de viajar; que sea también de preparación de
" VIAJAR HACIA TI" .
Decía José F. Moratiel - amigo del silencio - : "Vete a tu casa. No te entretengas en el camino. Vete a tí ".
Es el único camino importante: ir a uno mismo. Es decir el viajar, a este instante, sin detenerse en el camino. Sin andar divagando por el antes, por un ayer que ya pasó; sin soñar con un futuro ilusorio, fantasioso e irreal.
El que ha recuperado la mirada pura, inocente, solo ve el ahora que se ensancha y se dilata como la eternidad.
El que ha despertado, sólo vive sumergido en el ahora, en el aquí, en este momento.
Viajar al ahora no es un viaje maravilloso, es un viaje en el que uno, sin pausa no deja de maravillarse. Tan solo en el ahora hay asombro y sorpresa casi infinita de eternidad.
Es en este instante donde mi alma reposa.
Es en este ahora donde mi corazón deja de estar alborotado, sobresaltado.
Es ahora, es aquí donde mi ser se siente remansado.
El verano, tiempo de extroversión, de salir, de viajar; que sea también de preparación de
" VIAJAR HACIA TI" .
Decía José F. Moratiel - amigo del silencio - : "Vete a tu casa. No te entretengas en el camino. Vete a tí ".
Es el único camino importante: ir a uno mismo. Es decir el viajar, a este instante, sin detenerse en el camino. Sin andar divagando por el antes, por un ayer que ya pasó; sin soñar con un futuro ilusorio, fantasioso e irreal.
El que ha recuperado la mirada pura, inocente, solo ve el ahora que se ensancha y se dilata como la eternidad.
El que ha despertado, sólo vive sumergido en el ahora, en el aquí, en este momento.
Viajar al ahora no es un viaje maravilloso, es un viaje en el que uno, sin pausa no deja de maravillarse. Tan solo en el ahora hay asombro y sorpresa casi infinita de eternidad.
Es en este instante donde mi alma reposa.
Es en este ahora donde mi corazón deja de estar alborotado, sobresaltado.
Es ahora, es aquí donde mi ser se siente remansado.
lunes, 13 de abril de 2009
MADUREZ
MADUREZ es la habilidad de controlar la ira sin violencia o destrucción.
MADUREZ es PACIENCIA ,el estar dispuesto a sacrificar un gozo inmediato en favor de un bien futuro.
MADUREZ es PERSEVERANCIA , la voluntad para superar un proyecto o situación , sin importar la oposición o aspectos negativos.
MADUREZ es DADIVOSIDAD , responder a las necesidades de otros , muchas veces a expensas de nuestros propios intereses.
MADUREZ es la capacidad de enfrentarse a la derrota sin excusas ni colapso.
MADUREZ es HUMILDAD , lo que hace a uno suficiente grande para decir : “ yo estuve equivocado ”. Y cuando tenga la razón no decir: “ yo te lo dije ”.
MADUREZ es la habilidad para tomar decisiones y tener la fortaleza de respaldarlas hasta el final. El inmaduro se pasa la vida explorando incontables posibilidades y nunca decide ni hace nada.
MADUREZ es RESPONSABILIDAD , mantener su palabra aunque haya crisis. Los inmaduros son los maestros de las excusas , siempre están confundidos y desorganizados , sus vidas son una maraña de promesas rotas , ex – amigos , proyectos sin terminar y de buenas intenciones que nunca se materializaron.
MADUREZ es el arte de vivir en paz con aquellos que no piensan como nosotros
MADUREZ es PACIENCIA ,el estar dispuesto a sacrificar un gozo inmediato en favor de un bien futuro.
MADUREZ es PERSEVERANCIA , la voluntad para superar un proyecto o situación , sin importar la oposición o aspectos negativos.
MADUREZ es DADIVOSIDAD , responder a las necesidades de otros , muchas veces a expensas de nuestros propios intereses.
MADUREZ es la capacidad de enfrentarse a la derrota sin excusas ni colapso.
MADUREZ es HUMILDAD , lo que hace a uno suficiente grande para decir : “ yo estuve equivocado ”. Y cuando tenga la razón no decir: “ yo te lo dije ”.
MADUREZ es la habilidad para tomar decisiones y tener la fortaleza de respaldarlas hasta el final. El inmaduro se pasa la vida explorando incontables posibilidades y nunca decide ni hace nada.
MADUREZ es RESPONSABILIDAD , mantener su palabra aunque haya crisis. Los inmaduros son los maestros de las excusas , siempre están confundidos y desorganizados , sus vidas son una maraña de promesas rotas , ex – amigos , proyectos sin terminar y de buenas intenciones que nunca se materializaron.
MADUREZ es el arte de vivir en paz con aquellos que no piensan como nosotros
miércoles, 18 de marzo de 2009
La primavera de Nyojo y Machado
La primavera con Tendo Nyojo y Antonio Machado
Hace unos días me encontré en mi correo con estos poemas que me había enviado un amigo, y de inmediato, me di cuenta que habíamos ya superado el solsticio de invierno
¡¡y que invierno !! y nos llegaba ya la primavera: tiempo de renovación , de vida, de
despertar……
El viejo ciruelo de podadas ramas
se cubre de brotes.
Florece de pronto: una, dos flores se abren,
luego tres, cuatro, cinco,
innumerables.
Su pureza es admirable
y su perfume más allá de todo elogio.
Cuando los pétalos caen,
la primavera está cerca,
la brisa sopla entre la hierba y los árboles.
Los monjes uno a uno,
despiertan en su intimidad
a su visión interior.
De nuevo la borrasca y la tormenta
traen un cambio brusco
y el suelo se vuelve a cubrir
de una espesa capa de nieve.
Pero en su interior,
el viejo ciruelo se mantiene en calma,
en nada le afecta la tormenta.
Tendo Nyojo
(Citado por Dogen en Baige,Shobegonzo)
Al olmo viejo, hendido por el rayo
Y en su mitad podrido,
con las lluvias de Abril y el sol de Mayo,
algunas hojas verdes le han salido.
Antes que te derribe, olmo del Duero,
con su hacha el leñador, y el carpintero
te convierta en melena de campana,
lanza de carro o yugo de carreta.
Olmo, quiero anotar en mi cartera
la gracia de tu rama verdecida.
Mi corazón espera
también, hacia la luz y hacia la vida,
otro milagro de la primavera.
Antonio Machado.
Hace unos días me encontré en mi correo con estos poemas que me había enviado un amigo, y de inmediato, me di cuenta que habíamos ya superado el solsticio de invierno
¡¡y que invierno !! y nos llegaba ya la primavera: tiempo de renovación , de vida, de
despertar……
El viejo ciruelo de podadas ramas
se cubre de brotes.
Florece de pronto: una, dos flores se abren,
luego tres, cuatro, cinco,
innumerables.
Su pureza es admirable
y su perfume más allá de todo elogio.
Cuando los pétalos caen,
la primavera está cerca,
la brisa sopla entre la hierba y los árboles.
Los monjes uno a uno,
despiertan en su intimidad
a su visión interior.
De nuevo la borrasca y la tormenta
traen un cambio brusco
y el suelo se vuelve a cubrir
de una espesa capa de nieve.
Pero en su interior,
el viejo ciruelo se mantiene en calma,
en nada le afecta la tormenta.
Tendo Nyojo
(Citado por Dogen en Baige,Shobegonzo)
Al olmo viejo, hendido por el rayo
Y en su mitad podrido,
con las lluvias de Abril y el sol de Mayo,
algunas hojas verdes le han salido.
Antes que te derribe, olmo del Duero,
con su hacha el leñador, y el carpintero
te convierta en melena de campana,
lanza de carro o yugo de carreta.
Olmo, quiero anotar en mi cartera
la gracia de tu rama verdecida.
Mi corazón espera
también, hacia la luz y hacia la vida,
otro milagro de la primavera.
Antonio Machado.
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